lunes, octubre 30, 2006

A veces...

A veces no termino las frases. Como por ejemplo cuando el viernes pasado subí al elevador en la planta baja del edificio donde trabajo y una mujer, que entró poco antes que yo y presionó el botón del primer piso, me preguntó «¿a qué piso va?» y le respondí «al cuarto». La frase completa era «al cuarto, para subir un piso voy por las escaleras, vieja fodonga».